No hace mucho tiempo que estábamos celebrando el genio y la innovación de los análisis de sangre de la empresaria Elizabeth Holmes. En caso de que no estés familiarizado con su historia, Holmes se retiró de Stanford y fundó lo que todos pensábamos era una compañía revolucionaria de pruebas de sangre. El nombre de la empresa es Theranos.
La idea de Elizabeth era simple. Solo con un pinchazo en el dedo se podían hacer pruebas de miles de enfermedades. El mundo de la ciencia se rindió a los pies de esta técnica mucho menos invasiva. Theranos logró fama y reconocimiento internacional, y llegó a estar valorada en una cifra de $9 mil millones (€7,9 MM). Como propietaria del 50% de la empresa, el patrimonio neto de Elizabeth, en el papel, era de $4.5 mil millones (€4 MM). Era la multimillonaria femenina más joven que había hecho su fortuna con esfuerzo propio. Por tal razón apareció en portadas de revistas, y recibió innumerables premios y distinciones.
Pero la historia ha cambiado radicalmente para Elizabeth de una forma catastrófica. Hoy en día su fortuna se ha reducido a la NADA. CERO.
Hace pocos meses Theranos se metió en problemas cuando se supo que la compañía exageraba los resultados de los exámenes sanguíneos.
Varios pacientes han utilizado las pruebas de Theranos y las han comparado en otros laboratorios, y comprobaron que arrojan resultados muy imprecisos.
Eso hizo que la compañía fuera objeto de investigación criminal. Theranos es acusada de poner en riesgo a 81 personas con sus pruebas de hematología.
Theranos enfrenta problemas judiciales en todos los frentes.
Por tal razón docenas de inversores de capital de riesgo, analistas de la industria y otros expertos han llegado a la conclusión de que, luego de tantos problemas, la verdadera valoración de Theranos es de $800 millones (€704 millones) y no de $9 mil millones.
Holmes posee el 50% de todas las acciones de la compañía. Eso significa que si la empresa se vende mañana, restando el dinero que le corresponde a los inversores, Holmes no recibiría un centavo por la transacción.
Holmes todavía no se ha pronunciado sobre uno de los momentos más duros de su vida.
Not long ago we were celebrating the genius and innovation of blood tests businesswoman Elizabeth Holmes ago. In case you're not familiar with its history, Holmes retired from Stanford and founded what we all thought was a revolutionary blood testing company. The company name is Theranos.
The idea of Elizabeth was simple. Only with a finger prick tests they could make thousands of illnesses. The world of science at the foot of this technique far less invasive surrendered. Theranos achieved international fame and recognition, and came to be valued at a figure of $ 9 billion (€ 7.9 million). As the owner of 50% of the company, the net assets of Elizabeth, on paper, was $ 4.5 billion (€ 4 million). She was the youngest female billionaire who had made his fortune with their own efforts. For this reason she appeared on magazine covers, and received numerous awards and distinctions.
But the story has changed radically for a catastrophically Elizabeth. Today his fortune has been reduced to nothing. ZERO.
Theranos few months ago he ran into trouble when it emerged that the company exaggerated the results of blood tests.
Several patients have used Theranos tests and compared to other laboratories, and found that yield very inaccurate results.
That made the company was under criminal investigation. Theranos is accused of endangering 81 people with hematology tests.
Theranos faces legal problems on all fronts.
For this reason dozens of investors of venture capital, industry analysts and other experts have concluded that, after so many problems, the true valuation of Theranos is $ 800 million (€ 704 million), not $ 9,000 millions.
Holmes owns 50% of all company shares. That means that if the company is sold tomorrow, subtracting the money belongs to investors, Holmes would not receive a cent per transaction.
Holmes still has not ruled on one of the toughest moments of his life.
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