China presenta su primer avión comercial para competir con Airbus y Boeing

China presentó hoy la primera unidad, recién salida de fábrica, de su primer avión comercial de larga distancia, el C919, de diseño y fabricación nacionales, que aspira a competir en la próxima década con Airbus y Boeing por el mercado aeronáutico mundial.El conglomerado estatal creado en 2008 para materializar el proyecto, la Corporación de Aeronaves Comerciales de China (COMAC) mostró hoy en Shanghái el primer aparato construido en la planta de montaje y listo para los ensayos de tierra, aunque su primer vuelo de pruebas sólo está previsto por ahora para el año próximo.A pesar de los numerosos retrasos que ha sufrido el proyecto en los últimos años, y de que se temía que ese vuelo inicial pudiese postergarse hasta 2017, ahora se asegura que las primeras pruebas en el aire del aparato serán en 2016. Una presentación se está siguiendo con gran despliegue en los medios chinos.Con todo, no se espera que este modelo, del que ya hay 517 encargos por 21 aerolíneas y gestoras de aparatos chinas y extranjeras, pueda entrar en servicio comercial hasta pasados unos tres años de sucesivas pruebas de vuelo, es decir, entre 2019 y 2020.En un principio estaba previsto que este futuro rival chino de los Airbus A320 y Boeing 737 empezara a volar a finales de este mismo año, aunque la pasada primavera la prensa local filtró que los técnicos de la COMAC no veían eso posible, como poco, hasta la primera mitad de 2016.De esta manera, las primeras entregas de este modelo podrían verse retrasadas también hasta en unos dos años después de lo esperado inicialmente, si se hicieran en 2020.Eso supondrá que el C919 será, cuando se incorpore a las primeras aerolíneas comerciales que lo utilicen, un aparato en desventaja tecnológica frente a las versiones mejoradas, con motores más modernos, de los actuales A320 y B737, que empezarán a entrar en servicio hacia 2017.La lentitud de la COMAC se explica por su cautela en el proceso, ya que, a largo plazo, China aspira a hacerse un hueco en el mercado mundial de grandes aviones de pasajeros con este aparato de fuselaje estrecho, un segmento que supone actualmente más de la mitad de las aeronaves comerciales en activo del planeta.En ese sentido, el conglomerado chino parece preferir acumular retrasos que cometer fallos que arruinen su reputación desde el principio.El C919 puede llevar entre 158 y 174 pasajeros, en función de las distintas configuraciones posibles, con una autonomía de entre 4.075 y 5.555 kilómetros.Aunque el avión es de fabricación y diseño chinos, numerosos componentes proceden, como es habitual, del mercado internacional, e incluso una empresa española, Aritex, es la responsable de montar la caja central del ala, es decir la estructura que sostiene las alas en el fuselaje.China se ha convertido en un mercado clave para el sector aeronáutico mundial, y se espera que necesite entre 5.300 y 6.330 nuevos aviones de pasajeros en los próximos 20 años, según las previsiones Airbus y Boeing, respectivamente, lo que en cualquier caso solo es una quinta parte de la demanda total prevista para todo el planeta.Aun así, COMAC no aspira sólo a abrirse camino impulsada por su propio mercado doméstico, aunque sin duda será un factor clave en la comercialización del C919 y el desarrollo de la compañía, sobre todo teniendo en cuenta que la gran mayoría de la aviación comercial en China está en manos de grandes aerolíneas estatales.De hecho, eso indica la experiencia con el paso tecnológico previo sin el cual el C919 no habría sido posible: el ARJ-21 "Xiangfeng" ("Fénix Volador"), el primer reactor comercial de fabricación china para distancias medias, un proyecto heredado por la COMAC que competirá con Embraer y Bombardier.El ARJ-21, que empezó a volar en pruebas en 2008 y se espera que entre en servicio en 2016, ha sido comprado no sólo por aerolíneas chinas, sino también de el Congo, Laos, Birmania e Indonesia.



China today unveiled the first unit at delivery of its first long-haul commercial jet, the C919, national design and manufacturing, which aims to compete in the next decade with Airbus and Boeing by the aeronautics market mundial.El conglomerate State created in 2008 to realize the project, the Corporation for Commercial Aircraft of China (COMAC) showed today in Shanghai the first device built in the assembly plant and ready for testing ground, although its first test flight is only intended for now for próximo.A year despite numerous delays the project has suffered in recent years, and it was feared that this initial flight could be delayed until 2017, now it says that the first tests of the device in the air will be in 2016. A presentation is being followed with great fanfare in all media chinos.Con not expected that this model, which is already 517 orders from 21 airlines and managers of Chinese and foreign equipment, to enter commercial service until a few three years of successive flight tests, that is, between 2019 and 2020.En It was initially planned that future Chinese rival Airbus A320 and Boeing 737 began to fly later this year, but last spring the local press It leaked that the technicians of the COMAC not see that possible, at least, until the first half of 2016.De Thus, the first deliveries of this model could also be delayed by up to two years later than initially expected, if made in 2020.Eso the C919 will be, when the first commercial airlines that use an apparatus in technological disadvantage to the enhanced versions with more modern engines, from the current A320 and B737, which will begin to be incorporated into 2017.La service to slow COMAC is explained by their caution in the process, and that in the long term, China aims to gain a foothold in the global market for large airliners with this set of narrow-body, a segment currently accounts for more than half of commercial aircraft in the world very active this regard, the Chinese conglomerate delays accumulate seems to prefer making mistakes that ruin your reputation from principio.El C919 can carry between 158 and 174 passengers, depending on the different possible configurations, with a range of between 4,075 and 5,555 kilómetros.Aunque the plane is Chinese manufacturing and design, many components come, as usual, the international market, and even a Spanish company, Aritex, is responsible for assembling the center wing box, is the structure that holds the wings in fuselaje.China has become a key market for the global aviation industry, and is expected to need between 5,300 and 6,330 new passenger aircraft in next 20 years according to Airbus and Boeing forecast, respectively, which in any case is only one fifth of the total demand expected for the entire planeta.Aun so, COMAC aims not only to make their way driven by its own domestic market, though doubtless will be a key marketing C919 and development of the company factor, especially considering that the vast majority of commercial aviation in China is held by major airlines estatales.De fact, experience shows that with technological step Previous without which the C919 would not have been possible: the ARJ-21 "Xiangfeng" ("Flying Phoenix"), the first commercial Chinese-made reactor for medium distances, a project inherited by the COMAC to compete with Embraer and Bombardier.El ARJ-21, which began flying in tests in 2008 and is expected to enter service in 2016, was bought not only by Chinese airlines, but also of the Congo, Laos, Burma and Indonesia.